Luego del Mundial de Francia 2019 el incremento en el futbol femenil fue tal que comenzaron a abarrotarse estadios y a romper récords de asistencia. En esta ocasión se vivirá la Copa del Mundo en Australia-Nueva Zelanda con un crecimiento de este deporte en esa rama.
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Es por ello que aunque la planeación se llevó a cabo antes, se dio a conocer que a unos meses de que se lleve a cabo esta justa deportiva de 2023 se haría un cambio de sede. Aunque muchas veces las razones dependían de otros espectáculos, en esta ocasión se podría dar este hecho debido a la demanda de boletos que hay.
Mayor capacidad
Australia e Irlanda serán las dos selecciones que se medirán en uno de los partidos inaugurales, el cual está programado para el 20 de julio. El lugar en el que se desarrollaría el encuentro es el Sydney Football Stadium, con capacidad de 42 mil 512 personas, de acuerdo con la FIFA.
Sin embargo, el medio Sidney Morning Herald reveló que las entradas se agotaron en cuestión de minutos, por lo que el presidente del Máximo Organismo, Gianni Infantino, aprobó la idea de emigrar al Accor Stadium, ya que tiene casi el doble del aforo, albergando a 83 mil 500 aficionados.
“En esta etapa, nada ha cambiado, pero tenemos muy claro que queremos que esta sea la Copa Mundial Femenina más grande y exitosa que hayamos tenido. Y eso significa que queremos que la mayor cantidad posible de fanáticos puedan acceder a él, por lo que nada está descartado”, externó. Sarai Bareman, directora de asuntos femeninos de la FIFA, a Herald y The Age.