Uno de los grandes futbolistas que tuvo la Selección Alemana en los últimos años fue Mezut Özil, centrocampista que desarrolló una gran capacidad para desempeñarse junto a sus compañeros y que logró consagrar un campeonato del mundo en 2014, además de sus éxitos a nivel de clubes. Sin embargo, previo a encontrar su mejor versión, pudo haber llegado al Barcelona antes del Real Madrid, pero un factor humano fue determinante.
En una reciente entrevista, Özil recalcó que antes de fichar por el Madrid, estaba convencido de llegar a los Blaugranas, pues le gustaba su estilo de juego y hasta se imaginaba compartiendo campo con ellos, pero cuanto se reunió con los Culés, Pep Guardiola, entrenador en aquel entonces, no se acercó a conocerlo, algo que sí hizo Jose Mourinho, lo que fue decisivo para que el alemán eligiera.
La visita en Barcelona fue menos entusiasta y lo que fue más decepcionante es que Pep Guardiola no se tomó ni la molestia de conocerme. Antes de ese viaje me gustaba mucho el estilo de fútbol del Barcelona y realmente me podía imaginar jugando con ellos, pero el Madrid fue con todo. Así que José Mourinho fue sin duda el factor más importante en mi decisión. Después de mis visitas, mi decisión estaba clara al cien por cien: quería ser madridista.
La despedida de Mesut Özil
Cuando se anunció que Mesut colgaría los botines, muchos aficionados mostraron su admiración por los números del centrocampista, pues logró un total de 81 asistencias, lo que muestra la visión y compañerismo de un futbolista que sin tantos reflectores por las estrellas con las que compartió era, logró dejar huella con una peculiar manera de impactar el balón para evitar a los rivales.