La previa del Clásico Joven estuvo llena de controversia para Cruz Azul, pues se oficializó la partida de su último campeón de goleo, Uriel Antuna, quien además había sido el que más sacó la cara en la época de crisis en la Noria. Sin embargo, este movimiento aparentemente negativo permitió que Martín Anselmi nuevamente pudiera exponer su planteamiento favorito con dos delanteros en las figuras de Giorgos Giakoumakis y Ángel Sepúlveda.
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Recordemos que el torneo anterior, Anselmi utilizó a Sepúlveda junto a Gabriel Fernández al frente, con Antuna como carrilero al mismo estilo que Rodolfo Rotondi por la izquierda. Sin embargo, Uriel no se encontró por esa zona y el Toro terminó por lesionarse, sin mencionar que el ataque cementero tuvo que modificarse para no ser vulnerable a contragolpes.
A la larga, Cruz Azul sufrió modificaciones con Antuna en punta, pero ahora que se confirmó su salida, Anselmi se decidió a sentar a Ignacio Rivero y alinear dos puntas contra América, una de las mejores decisiones que pudo tomar para imponerse en el último Clásico Joven, ya que Giakoumakis mostró la potencia física para retener balones y Sepúlveda jalaba las marcas necesarias, por solamente decir un rubro de cada uno.
¿Cómo fue el gol de Giorgos Giakoumakis contra América?
Uno de los principales motivos por los que a Cruz Azul se le dificultaron los primeros minutos fue que América tenía línea de 3 en el fondo, por lo que Rodolfo Rotondi no lograba llegar a zona de peligro. En ese sentido, cuando un balón salió a donde Gonzalo Piovi para que el defensa inmediatamente mandara el pase a Rotondi, el carrilero cementero de un toque se perfiló, llegó al límite del campo y asistió al griego.
Sin embargo, desde que Rodolfo tomó carrera para la esquina, Giorgos ya estaba picando hacia el centro del área, mientras que Sepúlveda optó por correr hacia Rotondi, provocando que la marca se fuera con él y así liberó el espacio para que Giakoumakis cabeceará con colocación y suficiente fuerza, batiendo al arquero rival con un esférico que primero rebotó en el pasto y se incrustó en la portería.
El acompañamientos de Giakoumakis y Sepúlveda
La segunda anotación de Cruz Azul tuvo a Luis Romo como su principal artífice, pues el mediocampista tomó el balón y superó a dos rivales para mandar el centro retrasado a Ángel, quien impactó de primera intención y mandó a guardar el balón al ángulo del marco azulcrema, pero si vemos la jugada, nos daremos cuenta de que Giorgos le abre esa puerta a Sepúlveda.
Desde que Romo ganó la posición de centro, Giorgos se adelanta para abrir el espacio y que Ángel pueda frenarse para recibir el balón. Este tipo de acciones son más pensadas por delanteros nominales, por más que Antuna trató de adaptarse a la zona, no tenía la misma comprensión de la jugada para permitir que la asociación sin balón rindiera frutos.
Cruz Azul sigue necesitando otro refuerzo, no un extremo pero sí alguien que le de amplitud al plantel pensando en que se pudiera lesionar en algún momento alguien como Piovi o Willer Ditta, pero por el momento, el sistema cementero luce más liberado con dos atacantes.